En esta entrada resumo el espacio “La Bolsa y la Vida” de 17 de febrero.
¿Qué son las agencias de calificación crediticia, también denominadas agencias de raiting?:Son empresas que se dedican a analizar todos los datos necesarios para evaluar si los productos financieros (emitidos tanto por entidades privadas como públicas) pueden dar la rentabilidad que prometen y, lo que es más importante, si la entidad puede devolver el dinero que se le confía.
El veredicto de estas agencias tiene una importancia decisiva para dar confianza a quien compra productos financieros. Una calificación crediticia puede facilitar o dificultar, por ejemplo, que un Gobierno consiga crédito.
Lo realmente chocante es que estas agencias de calificación otorgaron una buena calificación crediticia a productos financieros que contenían las hipotecas subprime. Lo que quita bastante credibilidad a estas entidades. Pero, al parecer, sus análisis van a seguir siendo igualmente decisivos en el futuro, por muy increíble que parezca.
Las tres principales agencias de raiting son: Standard and Poor´s, Moodys y Fitch.
Utilizan un lenguaje codificado que consiste en la siguiente nomenclatura:
-Se emplean las letras del abecedario A, B, C y D.
-Un producto financiero con calificación AAA tendría la excelencia en calidad.
-Si tiene AA, sería un producto peor, aunque seguiría siendo bastante bueno.
-Si sólo tiene A, se trataría de un producto de menor fiabilidad aunque bueno.
-Si se califica como B, ya entramos en los productos especulativos, con algunos riesgos pero con mayores intereses.
-Si se califica como C, nuestra inquietud debe crecer. Y la letra D indica una entidad o país con impago de todas sus obligaciones financieros.
-A continuación, están los signos + y – que introducen ciertos matices. Por ejemplo, AA+ sería menos fiable que AAA, pero de mayor seguridad que AA.
¿Quién paga a las agencias de calificación? Los Bancos. Hay dos formas:
-Las agencias de calificación venden sus análisis. La Comisión Europea ha denunciado que estas agencias cobran demasiado caros sus informes sobre la situación en Estados Unidos a los bancos europeos.
-Por otro lado, una entidad financiera puede acudir a estas agencias para solicitar que le valore un producto financiero concreto, el conjunto de productos o también a la entidad en sí.
La calificación crediticia es esencial ya que es muy difícil vender un producto en los mercados financieros si no cuenta con dicha calificación.
A pesar de la polémica que despiertan las agencias de raiting, se les sigue otorgando un relevante credibilidad. Tanto es así que, como consecuencia del cambio de valoración de la Deuda Pública española de AAA a AA+ por parte de Standard and Poor´s, el Estado español va a tener que pagar más cara la emisión de deuda, es decir, dar mayores intereses. Y esto va a tener importantes repercusiones económicas, ya que el Estado va a seguir necesitando emitir Deuda Pública con todo el esfuerzo que se está realizando para salir de la crisis.
Es probable que este año aparezca una nueva regulación que cambie el entorno operativo de estas agencias debido a sus contradicciones así como por el enorme poder que poseen. Una calificación errónea puede llevar al pozo a una empresa o incluso a un país.
Nota1: podéis acceder a la grabación del espacio en el apartado “Emisiones anteriores” de la bitácora de Paco Álvarez y en la página de “No es un día cualquiera”.
¿Qué son las agencias de calificación crediticia, también denominadas agencias de raiting?:Son empresas que se dedican a analizar todos los datos necesarios para evaluar si los productos financieros (emitidos tanto por entidades privadas como públicas) pueden dar la rentabilidad que prometen y, lo que es más importante, si la entidad puede devolver el dinero que se le confía.
El veredicto de estas agencias tiene una importancia decisiva para dar confianza a quien compra productos financieros. Una calificación crediticia puede facilitar o dificultar, por ejemplo, que un Gobierno consiga crédito.
Lo realmente chocante es que estas agencias de calificación otorgaron una buena calificación crediticia a productos financieros que contenían las hipotecas subprime. Lo que quita bastante credibilidad a estas entidades. Pero, al parecer, sus análisis van a seguir siendo igualmente decisivos en el futuro, por muy increíble que parezca.
Las tres principales agencias de raiting son: Standard and Poor´s, Moodys y Fitch.
Utilizan un lenguaje codificado que consiste en la siguiente nomenclatura:
-Se emplean las letras del abecedario A, B, C y D.
-Un producto financiero con calificación AAA tendría la excelencia en calidad.
-Si tiene AA, sería un producto peor, aunque seguiría siendo bastante bueno.
-Si sólo tiene A, se trataría de un producto de menor fiabilidad aunque bueno.
-Si se califica como B, ya entramos en los productos especulativos, con algunos riesgos pero con mayores intereses.
-Si se califica como C, nuestra inquietud debe crecer. Y la letra D indica una entidad o país con impago de todas sus obligaciones financieros.
-A continuación, están los signos + y – que introducen ciertos matices. Por ejemplo, AA+ sería menos fiable que AAA, pero de mayor seguridad que AA.
¿Quién paga a las agencias de calificación? Los Bancos. Hay dos formas:
-Las agencias de calificación venden sus análisis. La Comisión Europea ha denunciado que estas agencias cobran demasiado caros sus informes sobre la situación en Estados Unidos a los bancos europeos.
-Por otro lado, una entidad financiera puede acudir a estas agencias para solicitar que le valore un producto financiero concreto, el conjunto de productos o también a la entidad en sí.
La calificación crediticia es esencial ya que es muy difícil vender un producto en los mercados financieros si no cuenta con dicha calificación.
A pesar de la polémica que despiertan las agencias de raiting, se les sigue otorgando un relevante credibilidad. Tanto es así que, como consecuencia del cambio de valoración de la Deuda Pública española de AAA a AA+ por parte de Standard and Poor´s, el Estado español va a tener que pagar más cara la emisión de deuda, es decir, dar mayores intereses. Y esto va a tener importantes repercusiones económicas, ya que el Estado va a seguir necesitando emitir Deuda Pública con todo el esfuerzo que se está realizando para salir de la crisis.
Es probable que este año aparezca una nueva regulación que cambie el entorno operativo de estas agencias debido a sus contradicciones así como por el enorme poder que poseen. Una calificación errónea puede llevar al pozo a una empresa o incluso a un país.
Nota1: podéis acceder a la grabación del espacio en el apartado “Emisiones anteriores” de la bitácora de Paco Álvarez y en la página de “No es un día cualquiera”.
Hi everyone! I don't know where to begin but hope this place will be useful for me.
ResponderEliminarI will be happy to receive any help at the beginning.
Thanks and good luck everyone! ;)
Arribe a tu blog buscando otra cosa en yahoo y debo reconocer que esta muy bien escrito.
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarMuchas gracias por tu visita. Espero que te guste mi blog y que sigas visitándolo.
Lo dicho, muchas gracias.
Un saludo cordial.