jueves, 24 de enero de 2008

Ahorra dinero: usa tu biblioteca

Es curioso (o quizá no debiera serlo tanto) encontrar en un portal de información financiera, una llamada muy sugestiva al público en general para la utilización de las bibliotecas, mostrando todos los beneficios que puede suponer a la economía de las personas. Aquí os transcribo esta interesante recomendación. El artículo pertenece a Jeffrey Strain, un colaborador del sitio web estadounidense TheStreet.com. Hay que aprovechar la labor de las bibliotecas, están a nuestro servicio.


“Tu biblioteca local debería ser uno de tus mejores amigos.

Esto es especialmente verdad si dedicas parte de tu tiempo a la lectura o a hacer búsquedas sobre economía familiar e inversiones.

El problema principal reside en que la mayoría de la gente aprovecha todos los recursos que les ofrecen las bibliotecas (posiblemente porque no las conocen).

Si no has visitado una biblioteca últimamente, puedes seguir pensando que las bibliotecas son sólo lugares donde uno puede tomar libros prestados. En realidad, ellas han ido mucho más allá en los últimos años y han abrazado con entusiasmo la revolución digital, hasta el punto que ello ha causado tensiones con anunciantes.

Las bibliotecas pueden ofrecer una inmensa cantidad de información que te ayudará en tus negocios personales e inversiones. A continuación, varias maneras en que la biblioteca puede echarte una mano:


Acceso a recursos desde casa: la primera idea que debes tener es que tienes que ir físicamente a la biblioteca para aprovecharte de sus recursos. Esto ya no es así. Actualmente, muchas bibliotecas ofrecen acceso gratuitamente “24/7” a sus bases de datos, desde tu propia casa.

Las bases de datos disponibles varían de una biblioteca a otra, pero la mayoría disponen de las versiones digitales de las revistas más populares (incluyendo negocios, inversiones, economía familiar y comercio), junto con una amplia variedad de fuentes de búsqueda, como periódicos y enciclopedias que no están disponibles en Internet. La mayor parte de ello no te costará ni un centavo. Todo lo que necesitas es una tarjeta de usuario de la biblioteca y tu ordenador personal con conexión a Internet.

El sistema de acceso a las bases de datos será diferente en cada biblioteca, por lo que lo mejor que puedes hacer es contactar con el referencista de tu biblioteca para saber exactamente qué está disponible y cómo acceder a ello desde tu casa.

Subscripciones: de nuevo, cada biblioteca ofrece diferentes. Muchas tienen acceso gratuito a los servicios de subscripción en línea, que no están indexados en los motores de búsqueda ni están disponibles sin realizar el pago de una cantidad. Dentro de estos materiales se encuentran libros electrónicos, música y audio-libros descargables. Puede incluir también contenidos web de revistas y periódicos cuyas subscripciones sólo se realizan a través de Internet.

Búsqueda de inversiones: si quieres hacer tus propias inversiones, el coste de célebres revistas y boletines financieros puede alcanzar los cientos de dólares. En muchas ocasiones, estas publicaciones contienen importante información que es complicado lograr por uno mismo. Es muy posible que dichas publicaciones se encuentren disponibles en tu biblioteca local gratuitamente, y otras muchas más estarán accesibles a través de Internet.

Si tu biblioteca no dispone de los fondos que tu quieres, puedes pedirles que los adquieran. A pesar de que los presupuestos pueden ser reducidos, te sorprenderás de cómo la mayoría de las bibliotecas trabajarán para ayudarte a conseguir la revista que deseas, especialmente si logras formar un grupo de amigos o un club de personas interesados en las finanzas, para hacer las mismas peticiones. Así el personal de la biblioteca sabrá que existe una comunidad de interés (en las inversiones financieras).

Asistencia gratuita para búsquedas e investigaciones: una de las mayores ventajas que proporcionan las bibliotecas, y que la mayoría de la gente se pierde, es la atención gratuita al usuario. Los bibliotecarios son muy buenos localizando aquella información que estás buscando. Si necesitas los mejores libros sobre una estrategia concreta de inversión o sobre el ámbito de las finanzas privadas, pero sabes muy acerca del tema, la biblioteca es un estupendo lugar para comenzar tus pesquisas.

Un sitio tranquilo para trabajar: tu casa puede que no sea siempre el lugar más sereno para leer y hacer una investigación. Pero si tu vas a la biblioteca, puedes incluso llevarte a los niños; ellos pueden pasar un rato entretenido en la sección infanil y encontrar libros y otros materiales interesantes, mientras tú trabajas. Además, muchas bibliotecas disponen de ordenadores que puedes utilizar para trabajar y están instalando conexiones wifi gratuitas que puedes usar para trabajar con tu ordenador portátil.

Una enorme colección de recursos: por último, pero no por ello menos importante, hay un increíble número de materiales que puedes tomar prestados gratuitamente. No sólo se limitan a los libros; también hay CD´s, vídeos, DVD´s, cintas, etc. Muchas bibliotecas tienen relaciones con otras bibliotecas de su área, con lo que si incluso tu biblioteca te parece pequeña, ellos te darán acceso a todos los libros de un extenso número de bibliotecas del área, incluso universitarias.

La biblioteca es un fantástico lugar para probar publicaciones financieras que pueden ser caras. Utiliza la versión de la biblioteca y si, después de leerla, piensa que necesitará el libro, el boletín, o la revista de una base de datos en curso, entonces sabrá que merecerá la pena comprarse la publicación. Pero si sólo lo necesitará ocasionalmente, o nunca más, usted se habrá ahorrado el precio de ese material.

Si no vas últimamente por tu biblioteca, saca un rato para pasarte por ella y mira. Pregunta qué servicios están disponibles. Te sorprenderá gratamente ver que hay muchísima más información económica de la que conocías, al alcance de tus dedos".

Nota1: este artículo lo he localizado en LISNews.org.

1 comentario:

  1. Me ha encantado este artículo, aunque también todos los demás. Por fín encuentro en la web un ciudadano bibliotecario que pone un poco de orden en el caos de la información.
    un saludo

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